Mi amado Mateo, fuiste lo mejor que me ha pasado en la vida, un verdadero hijo que llegó a acompañarme y protegerme con tan sólo 1 mes de vida. Llenabas cada rincón de la casa con tu alegría, amor y compañía, cuidabas cada paso que dábamos y fuiste el mejor guardián que pudimos tener. Desde el cielo nos seguirás cuidando y protegiendo y te recordaremos siempre con amor y alegría. Extrañaré tus besos, tus juegos y tus mordiscos cuando te enojabas y por sobre todo el amor y cuidado que nos diste todos los días en tus más de 13 años de vida. Te amaremos por siempre mi Mateito, tu luz seguirá iluminando nuestras vidas.
Te amo con todo mi corazón, tu papá Cristián.
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